Powered By Blogger

viernes, 3 de agosto de 2007

Los cuidados del bebé

Entrevista
El otoño y los cuidados del bebé




El esmero con el que una madre cuida a su pequeño recién nacido, debe verse incrementado durante los meses de noviembre y diciembre, tiempo de mayor incidencia de enfermedades en los bebés, debido al cambio climático propio de la temporada.

Con el fin de advertirnos sobre los problemas que pudieran presentarse, en la entrevista de hoy, el Dr. Carlos David González Guajardo, neonatólogo, nos habla sobre los padecimientos más frecuentes entre los que destacan el rotavirus y las infecciones de las vías respiratorias.




JJLLG: Doctor, Háblenos por favor, sobre lo que es el rotavirus.


Dr. González: Sí, claro, pues mira, se trata de un agente viral que se presenta con infección de las vías respiratorias y del intestino (gastroenteritis). Ocasiona diarrea aguda inductora de deshidratación grave. En un 20 ó 30% de los casos hay necesidad de hospitalizar al niño.

JJLLG: ¿Cuáles son los síntomas de esta enfermedad?

Dr. González: La enfermedad inicia con un síndrome gripal, en poco tiempo (puede ser de una a dos horas o hasta uno o dos días), empieza el niño con vómito frecuente, diarrea y fiebre. En consecuencia el pequeño ya no puede comer y si lo hace reincide el vómito. Entonces vienen la deshidratación, la debilidad y muchas náuseas. En este punto, el bebé tiene que ser internado para rehidratarlo, desistir de darle alimento, pues seguiría vomitando y deshidratándose, perdiendo sodio, electrolitos, potasio y cloro, lo cual redundaría en un deterioro agudo. El tiempo de hospitalización puede ser de dos a cuatro días. El tratamiento no es más que reposo, para que el mismo organismo se encargue del virus. No existe un medicamento especial para tratarlo.

JJLLG: ¿Cómo se realiza este diagnóstico?

Dr. González: El estudio con el que se confirma el diagnóstico es un panel coprológico. Es decir, un análisis de excremento para saber si el pequeño está absorbiendo grasa, azúcares, proteínas. Existe un examen muy específico llamado “examen de identificación de rotavirus en heces”, y este nos da positivo o negativo. Si el resultado es negativo y tiene los síntomas, puede tratarse de otro tipo de virus que de todos modos nos está dando problemas. La importancia de conocer un diagnóstico positivo, es porque este agente viral nos da una memoria inmunológica, es decir, si el niño ya lo padeció, queda protegido por cuatro, cinco o seis años.

JJLLG: ¿Cuáles serían los mejores cuidados para evitar contagios?

Dr. González: Los cuidados que se deben tener para evitar contagios es el aseo minucioso del niño enfermo y de la persona que lo está cuidando. Después de cambiar el pañal, se debe lavar lavar muy bien las manos. También el virus se puede contagiar a través del ambiente. Si un niño tose o estornuda, puede trasmitirlo a otra persona. Es muy importante tener muy en cuenta el aseo personal en los niños en el momento en el que están vomitando, o que están con su gripe, para no contagiar a los hermanos o demás familiares.

Otra situación que no debemos pasar por alto es que los adultos también se pueden contagiar. Hemos tenido aquí abuelitos enfermos de rotavirus a la semana siguiente de haber tenido a los niños. El proceso de enfermedad es similar en ambos casos. Quizá el papá o la mamá se enferman, pero el sistema de defensas es más fuerte que el de una persona mayor de 65 o 70 años, por lo que llegan a tener diarreas que pronto ellos mismos controlan sin llegar al hospital.


JJLLG: Los pequeños son muy susceptibles a las infecciones de las vías respiratorias, ¿Cuáles son las más comunes?


Dr. González: Otro padecimiento que tenemos en esta temporada es la infección de vías respiratorias. Las más comunes son la gripe o problemas de garganta. Sin embargo, éstas pueden desencadenar en algo más serio como neumonía o bronquiolitis.

La neumonía es una infección a nivel del pulmón, éste se inflama y no permite que haya una oxigenación adecuada, En la bronquiolitis el problema infeccioso llega nada más hasta los bronquios y bronquíolos. El bronquio está cerrado, y no entra el suficiente aire, el bebé no puede respirar adecuadamente. Los síntomas son los mismos: fiebre, dificultad para respirar: los niños se ven cansados con respiración muy agitada, no tienen mucha actividad porque están esforzándose en respirar.

La causa más común de la enfermedad es un agente viral, pero también pueden presentarse casos donde la razón es un factor bacteriano. Si se llega a presentar esto último, se trata de un problema bastante serio que puede llevar a complicaciones muy importantes. La confirmación de un problema de este tipo es por medio de una radiografía, en la cual vemos si existe una infección en el pulmón o en los bronquios, entonces determinamos la necesidad de internar al bebé para darle medicamentos que le abran los bronquios y antibióticos. Normalmente estos niños pueden estar en el hospital de cinco a siete días o hasta dos semanas, situación que para los papás llega a ser angustiante.

JJLLG: ¿Cómo prevenirse ante el acecho de estos micro-organismos?

Dr. González: En ocasiones, las mamás tienen un sentimiento de culpa porque piensan que cuando un pequeño se enferma gravemente, fue por una gripe mal cuidada. Sin embargo, ocasionalmente ante ciertas condiciones, un virus que se encuentra en la garganta logra brincar todas las defensas naturales del organismo, como son la nariz, las anginas, aún los bronquios mismos y llegar al pulmón. Los cuidados para prevenir estas dificultades en los niños, obviamente son cuestiones de sentido común: si el niño está recién bañado no se debe exponer al frío, evitar que pise descalzo el suelo, porque esto va a predisponer a que se enferme.

Si no hay virus no hay enfermedad, mas el ambiente está lleno de ellos. Nosotros mismos portamos muchos virus y bacterias. Al estornudar, al toser, los estamos arrojando. A nosotros no nos traen problemas porque ya hemos producido defensas, pero a un bebé sí porque él no ha tenido contacto con la gran variedad de micro-organismos, En conclusión: La causa más común de contagio somos los adultos. Pisar el suelo frío, sacar al niño recién bañado al exterior cuando el clima es fresco no es lo que ocasiona la enfermedad, pero si predispone a que la padezca. Los cambios bruscos de temperatura hacen que se inflamen todas las mucosas de la nariz y la garganta, como un medio de protección del organismo para evitar que entre aire frío, pero esto abre la puerta a los virus que andan por ahí.

JJLLG: ¿Qué tan graves es no aplicar a tiempo sus vacunas a los bebés?

Dr. González: Las vacunas cumplen con la función de fortalecer el sistema inmunológico del bebé y quede protegido de las enfermedades que pueden tener más graves consecuencias. Existe el mito de dejar al niño a merced de las enfermedades para que vaya agarrando defensas. Cuando entró la vacuna de la varicela mucha gente dijo: “Déjalo que se contagie de varicela, al cabo no pasa nada”. Pero si pasa. Hay niños a los que se les complica la enfermedad, llegan hasta el hospital por una varicela y desgraciadamente fallecen.

No podemos dejar de mencionar la vacuna de la influenza que está formada por tres de muchos tipos de virus. La vacuna desarrolla cada año porque como todos sabemos algunos virus como el de la gripe tienen la capacidad de cambiar su estructura muy fácilmente, entonces si el cuerpo tenía defensas contra cierta estructura del virus, al mutar, ya las defensas no lo reconocen. Cada año se cambian las vacunas para la temporada en curso, y su aplicación es ya una recomendación general, para los niños, para quienes trabajan en guarderías, quienes tienen alguna enfermedad en especial, adultos, personas de la tercera edad. A veces, una vacuna aplicada a tiempo puede evitar la hospitalización.

JJLLG: ¿Cuáles son las etapas de más riesgo durante período de adaptación del recién nacido?


Dr. González: Este período de transición es muy importante y se da aproximadamente durante las primeras seis horas después de que nace un bebé. Los médicos tenemos que estar muy atentos, de que todo se dé en forma adecuada.

La Circulación: Dentro de la mamá, el sistema circulatorio del infante depende por completo del cordón umblical. Tiene un sentido, una dirección determinada. Al momento de nacer, cuando se corta dicho cordón, se presentan una serie de cambios en el corazón. Se modifica totalmente la circulación sanguínea del bebé. Esto es normal y no tiene por qué haber problema. Pero cuando sucede que el niño no respira a tiempo, que la placenta se haya desprendido antes, o que tenga un problema que se llama sufrimiento fetal, entonces esto ocasionará que los mencionados cambios no se den bien. Este es un momento crítico que el 90% de los niños pasa sin problemas porque la naturaleza obra muy bien. Luego viene el período de adaptación de seis horas.

Sufrimiento Fetal: Dificultad que ocurre cuando por alguna causa el bebé, dentro del útero, no recibe el oxígeno y/o el alimento necesarios para su normal desarrollo.

La Respiración: En este tiempo el bebé tiene que aprender a respirar. El centro respiratorio comienza a funcionar. Antes el oxígeno lo recibía a través de la placenta, después es él quien tiene que conseguirlo. En este período de seis horas el problema más frecuente es la dificultad para respirar. El bebé nace hinchadito por el mismo ambiente del líquido que tiene. La piel es una membrana que no es completamente impermeable y en ocasiones ese líquido que está en la piel también está en el pulmón, lo que impide una respiración adecuada.

La Temperatura: Dentro del útero, rodeado de un líquido, el feto está protegido bajo una temperatura de 37 grados, él no tiene que hacer ningún esfuerzo para mantener su temperatura. Al nacer el cambio es brusco, de 37 pasa a 26 grados que es la temperatura más cálida que normalmente puede tener un hospital. Estamos hablando de 11 grados de diferencia. Lo primero que hacemos los pediatras es secar al bebé porque la humedad hace que pierda calor y es puesto en una cuna radiante (con calor). Todo esto es un shock para el recién nacido: enfrentar su cuerpecito a la necesidad de regular la temperatura en ese momento.

La Digestión: Otra situación es el aparato digestivo, un cambio más. Dentro de la madre ya estaba funcionando, pero de una forma lenta. En el momento en que nace el bebé, empieza a tragar aire y a movilizar todo el intestino. De aquí también depende el éxito en la alimentación.

JJLLG: ¿Qué ventajas tiene la leche materna?

Dr. González: En primer lugar tenemos las propiedades gastrointestinales: Es decir, en relación a la tolerancia. Cada especie de mamífero tiene su leche. No es la misma tolerancia que va a tener un bebé a la leche humana materna, que a la leche de vaca. La composición es completamente distinta. Debido a esto, la leche especial para alimentar al ser humano bebé es la materna.

En segundo lugar, las propiedades inmunológicas: A través de la leche, la madre está trasmitiendo defensas a su hijo. Ya le pasó muchas durante el embarazo, pero a la hora de alimentarlo con la leche está aumentando dichas defensas. Desafortunadamente no todas las mamás tienen la capacidad de amamantar al cien por ciento a su bebé. Entonces se deben apoyar en ciertas fórmulas de leche de vaca que han sido modificadas en toda su estructura, por eso el organismo del bebé la tolera muy bien. No es como la leche normal que tomamos los adultos, pero no deja de ser proteína de vaca.

JJLLG: Hemos escuchado que ciertos niños padecen intolerancia a la leche materna... ¿Qué ocasiona tal intolerancia?

Dr. González: Aunque es un caso muy raro, esta intolerancia es ocasionada por alergias. Es un rechazo que tiene el organismo del bebé hacia esa leche. Tenemos casos de mamás que tienen una muy buena producción de leche y su bebé no la tolera. Quizá por problemas alérgicos de la misma madre o que haya antecedentes de éstos en la familia. Para que la leche materna sea de utilidad, el período de lactancia es de seis meses. Hay mamás que amamantan a su bebé ocho, diez meses o dos años, pero es sólo hasta los seis meses que la leche tiene valor nutricional e inmunológico. Cuando la mamá es alérgica y no tuvo una buena orientación en cuanto a su alimentación, es posible que el bebé padezca de intolerancia.

2 comentarios:

  1. Me parece una absoluta barbaridad que la leche materna deja de alimentar después de 6 meses (claro, por eso la Organización Mundial de la Salud, la Asociación Española de Pediatría y UNICEF recomiendan dar pecho 2 años de edad como mínimo).

    Igual que la leche de vaca siempre alimenta, la humana también. Independientemente de la edad del lactante.

    No existe la alergia a la leche materna. Un perro no puede tener alergia a la leche de perra ni un ternero a la leche de vaca. Las alergias se pueden producir al tomar leche de una especie que no es la nuestra.

    Lo que sí puede suceder es que un bebé sea propenso a tener alergia a las proteínas vacunas y al recibirlas por la leche materna, manifieste síntomas alérgicos. Pero con que la madre elimine estas proteínas de la dieta, asunto arreglado. La leche de fórmula sí que le haría daño. Y hay otros alimentos al que el niño puede ser alérgico y que puede recibir a través de la leche materna, pero siempre es mejor seguir dando pecho y controlar la dieta materna a destetar.

    Yo no sé cómo puede haber pediatras que se olviden de que somos mamíferos y de que hasta finales del siglo XVIII no se comenzó a comercializar la leche para lactantes. Hasta entonces, a los niños que se les daba leche de vaca o cabra sin adaptar casi siempre se morían o enfermaban gravemente. Si su madre no les amamantaba necesitaban una nodriza.

    No tiene ningún sentido creer que la leche a partir del 6º mes deja de alimentar.

    Además, tengo la experiencia de lactancia prolongada con mis hijas. Ha habido épocas en las que ha sido su único alimento o el 90% de su dieta y no se han desnutrido. Todo lo contrario, han crecido y se han desarrollado perfectamente. Son dos niñas muy sanas y nutridas.

    Por favor, antes de publicar mitos urbanos de este tipo, sin ningún respaldo científico, infórmense.

    http://www.aeped.es/lactanciamaterna/rpmf18.htm

    ResponderEliminar
  2. Muchas Gracias a Désirée por su comentario. Ciertamente que la entrevista presentada fue realizada a un neonatólogo -especialista de renombre- acá en la ciudad de Monterrey, como todos los que entrevisté para la revista DIEZ EN SALUD. No sé qué pasa exactamente con los médicos, pues en ocasiones dices cosas inexactas e irresponsables. Un ejemplo es que el pediatra que atendía a mi sobrinita, les dijo a mi hermano y mi cuñada que a los 4 meses tenían que destetarla. Cosa que mi cuñada no hizo.

    Prometo pasar su comentario al médico entrevistado y publicar su réplica.

    ResponderEliminar

¡Quisiera conocer tu opinión!